¿Y si fuera verdad?
Que la vida vale más
que un kilo de oro
que el más preciado metal
que los millones en el banco
que un simple señor o don.
Y si los sueños
no solo sueños son.
Si no ideas y proyectos
que nacen de nuestro pensamiento
y construimos con nuestras manos
por qué sabios somos.
¿Y si fuera verdad?
Que nuestro mayor don
es crear y soñar
sentir, amar, donarnos a los demás
y a cambio de ello
construimos la felicidad
en un mundo que ha olvidado
que vale más ser humano
que toda el ansia
el poder y la obsesión
de cumplir su voluntad.
¿Y si fuera verdad?
Que la misma verdad
es un regalo del cielo
que nos pone en nuestro lugar
dejando detrás
el camino que recorrimos
y no queremos contemplar
para no descubrir
cuánto hemos errado ya.