Noche amiga quiero decirte
contarte la pena
que mi corazón embarga
en este instante eterno
cuando miro a mis amigos
convertidos en enemigos
amantes de la justicia
montados en sus corceles de guerra
para combatir por sus ideas
arrasando campos
destruyendo lo edificado
sin mesura
sin piedad.
Las lágrimas surcan mis mejillas
noche amiga
compañera de fatigas
ante su intolerancia
su arrogancia
el poco respeto a los demás
y su oración a la misma fuerza
que lo arrebata todo
haciéndonos sentirnos fuerte
reyes de nuestra montaña
contemplado a todos
desde la cima.
Sin escuchar a la misma vida
que se nos derrama en nuestro ser
como agua prohibida
no vivida, ni comprendida
por no desear abrir los ojos.
Noche amiga, querida compañera
tarde a llegado la razón
y mis ojos se abrieron
a la realidad desolada
que he dejado a mi paso
y mis manos manchadas de sangre.
Ahora deja que te devuelva
mi espada de guerra
la armadura de fuego
que tan orgulloso utilizaba
y me devore la oscuridad
para nacer de nuevo
lejos de todo ello
y descansar del orgullo
y buscar refugio
en reconstruir lo destruido.