Ya sabes que eres
mi terroncito de azúcar
la parte más dulce de mi vida
que llevo escondida
en mi pecho bajo una capa
de insondable indiferencia.
Para que no me llamen blando
y me confundan con aquellos
que siempre están soñando
con ese amor que todo lo puede.
Y si sueño que sea contigo
mi terroncito de azúcar
pero soñaré en silencio
para que nadie sepa la verdad
que me muero por tus besos
por las caricias de tus manos
y me susurres al oído
aquello que tu y yo sabemos.
No tengo otra forma de vivir
de mantener mi cordura
la fachada de hombre duro
en medio de un mundo
cada vez más impersonal.
Mi terroncito de azúcar
no puedo dejar que nadie descubra
lo mucho que te necesito
pues me encadenarían a su maldad
si descubrieran esta verdad.
Y yo no deseo que manchen
la blancura de esta dulzura
con sus manos negras
y sus ojos oscuros y viciosos
de puro poder y ansia
por aquello que no pueden tener.
Mi amor
mi dulce terroncito de azúcar
no comparto tu dulzura
con nadie más.
Quiero decirte que amo tu verde tu hermosura terrosa tan llena de vida tan generosa
Pérdida estabas cuando te encontré entre los jirones de una vida repleta de éxitos
Consentida te llaman por que eres una descarga te enfrentas a los matones que intentan…