a locura del mundo encerrada en el corazón de un tirano con insuflas de gran gobernador
Que tristeza la mía al contemplar la destrucción qué causa tu corazón por la pasión de mantenerte
El odio nos invade cuando vemos la destrucción qué causa tu deseo y la imposición de tu voluntad
Dejamos de llorar a la hora de empuñar el fusil para defendernos de la muerte
Bañado en sangre vives en tu palacio construyendo tu futuro bajo tus manías tus deseos
Estoy deshecho por dentro ante tanta barbarie por la ambición de un ser autoproclamado Zar de la muerte
Quiero construir esa vida qué truncada por las balas queda mutilada decapitada de raíz tendida en el suelo
Bajo el sol contemplo las vidas arrasadas por las bombas la soledad y la lejanía de los hombres
Hasta cuándo veré vertir tus lágrimas por la tiranía de las balas y esos cuerpos mutilados por la cruel realidad