Cada día, en un instante
me pierdo en tu calidez
cuando me abrazas
al volver del cruel trabajo
y me besas en la oreja
dejándome desnudo ante ti.
Poemas al alba
Cada día, en un instante
me pierdo en tu calidez
cuando me abrazas
al volver del cruel trabajo
y me besas en la oreja
dejándome desnudo ante ti.