Después de destruir la fábrica
nos tumbamos en el suelo
a las afueras de la ciudad
agotados, sin fuerzas
sin saber que pasaría ahora.

Poemas al alba
Después de destruir la fábrica
nos tumbamos en el suelo
a las afueras de la ciudad
agotados, sin fuerzas
sin saber que pasaría ahora.