Del relato «Lágrimas por mi tierra»
Mi querida tierra
que tantas lágrimas
haces derramar
y tanta sangre se a vertido
por construir la vida en ella.
A ti te quiero decir
que si me golpean
sea por tu causa
si me insultan
sea en nombre de la libertad
si me encadenan
sea por luchar por la vida.
Y si todo me lo arrebatan
y solo me dejan con lo puesto
que sea por ti
mi querida tierra
tan bella como salvaje
que nos enseñas a no doblegarnos
ante la injusticia
ni aquellos que desean
vernos doblegados
por el poder unificador.
Y si solo me quedan la lágrimas
y mis manos vacías
llenas de cortes y sangre
magulladas por la acción
mi querida tierra
sea por la vida que me has dado
por sus mejillas sonrosadas
por sus labios tiernos
por los hijos que ya no tendremos.
Pero me levantaré
como siempre hago
y sonreiré al infortunio
le mostraré mi rostro más amable
y mi sonrisa más abierta
y volveré de nuevo
a construir
piedra a piedra
nuestro futuro.
El tuyo y el mio
para que nada quede en el vacío
y los vientos de guerra
se desvanezcan.